Como una estampa detenida en el tiempo, enclavado en el corazón de los Valles Calchaquíes en el Noroeste de Argentina (más específicamente en la Provincia de Salta), se encuentra Cachi, un pintoresco pueblo que nace en la unión de los ríos Cachi y Calchaquí, y que se encuentra a 2280 metros sobre el nivel del mar y a 157 kilómetros de la ciudad de Salta por la mítica Ruta Nacional 40.
Para acceder a Cachi, se puede optar por tres caminos diferentes:
- Tomando la Ruta Provincial 33, desde Salta atravesando la Quebrada de Escoipe, Cuesta del Obispo y el Parque Nacional los Cardones.
- Por Ruta Nacional 40, desde San Antonio de Los Cobres a través del Abra del Acay, la Poma y Payogasta.
- Por Ruta Nacional 40, desde Cafayate a través de Angastaco, Molinos y Seclantás.
Sin embargo, la ruta más escogida por todos aquellos que visitan este hermoso pueblo, es la Ruta Provincial 33 debido a los hermosos y variados paisajes que atraviesa, siendo el paisaje más espectacular: Cuesta del Obispo.
Para llegar a la localidad de Cachi, lo más asombroso y fascinante se encuentra en el camino:
Partiendo desde Salta hacia el Sur por la Ruta Nacional 68, se llega hasta El Carril, ahí se toma el camino a la derecha que conduce a Chicoana para luego continuar por la Ruta Provincial 33 y comenzar el ascenso a la famosa Quebrada de Escoipe. Esta quebrada en algunos tramos es muy estrecha, limitada por altos paredones de piedra y se caracteriza por su intenso color verde de la selva en la montaña que es el marco de las mejores fotos panorámicas. Es una zona donde predomina la vegetación selvática y la acompaña el río Quebrada de Escoipe.
Más arriba, continuando por un camino algo sinuoso, el vuelo de los cóndores anuncia que estamos en la zigzagueante Cuesta del Obispo, es ahí donde la tierra se confunde con el cielo, donde las montañas son aterciopeladas, donde las nubes te envuelven y donde tocar el cielo con las manos ya no resulta imposible. Se puede caminar entre este paisaje mágico por un sendero para llegar al Valle Encantado, rocas enormes, pequeñas lagunitas y un verde esmeralda de fantasía. Un paisaje alucinante que une formas y colores naturales de sorprendentes contrastes, donde la erosión eólica y la lluvia esculpieron en el tiempo insólitas y admirables bellezas, también se pueden observar pequeñas lagunas por el agua acumulada de las lluvias y se convierten en bebederos naturales de los cóndores que siempre están sobrevolando la zona, y además adentrándose al interior de las cuevas, se pueden hallar pinturas rupestres. Valle Encantado, merece un alto en el camino a Cachi para disfrutar de este trekking entre los senderos. Es recomendable no bajar del auto si el camino se encuentra húmedo por lloviznas.
En un tramo de 20 kilómetros entre nubes de algodón y a puro zig-zag por la Ruta Provincial 33 que alcanza su altura máxima de 3620 metros sobre el nivel del mar, se llega al punto culminante de este recorrido: Piedra del Molino (a 93 kilometros de Salta). Desde aquí se puede apreciar la fascinante vista de la Quebrada de Escoipe, y además en este sitio se encuentra una pequeña Capilla de piedra y una piedra de moler tallada en granito con varias toneladas que da nombre al lugar. Un punto panorámico en donde vale la pena detenerse.
Ya descendiendo la cuesta, se encuentra un paisaje completamente distinto, totalmente árido, dominado por los principales protagonistas de este parque, se trata del Parque Nacional Los Cardones, donde cientos de ellos se distribuyen a un lado y otro de la Recta del TIn- Tin, un tramo especial del camino totalmente recto de 12 kilometros. De extensión trazada a 3000 metros sobe el nivel del mar. Según referencias históricas esta recta habría sido obra de los nativos quienes se valieron de fogatas a modo de jalones y tiene la perfección que hoy nos da la tecnología moderna con sus aparatos de precisión. A los lados de esta recta además de los innumerables cardones, se puede observar, hacia la derecha el Cerro negro y hacia la izquierda el Cerro Tin-Tin.
Continuando el camino a destino, a 10 kilometros de Cachi por la Ruta Nacional 40, el primer poblado al que se llega es Payogasta, una antigua población de origen indígena cuyo nombre significa blanquecino y que en realidad se encuentra tapado de color rojo por los característicos secaderos de pimiento.
Finalmente, luego de 3.30hs o 4.00hs (aproximadamente, depende las paradas que se hacen en el camino) de viaje en auto propio, remises o móviles de empresas de excursiones, se llega al pueblo de Cachi, el centro turístico más importante del Valle Calchaquí. Este legendario pueblo rodeado de cerros y montañas pertenecientes a la Precordillera de Los Andes, posee las características típicas de un poblado colonial que concilia y armoniza con detalles del arte precolombino: posee edificaciones blancas, casas de adobe, rejas de hierro forjado, techos de cardón o cañas cubiertas con barro. calles angostas empedradas y llamativas obras arquitectónicas y culturales que provocan admiración al quien lo visite.
En esta parte de la nota, te contamos el fantástico camino que conduce a Cachi, pero si te quedaste con ganas de conocer un poquito más sobre este pueblito, no te desanimes, en la segunda parte de la nota te vamos a contar más sobre él y que actividades podes realizar. Y no te olvides, recordá tener siempre bien los ojos abiertos en tu viaje, ya que el camino a este pequeño pueblito es soñado, principalmente en la Cuesta del Obispo, donde el silencio y las nubes al alcance de tu mano junto con el vuelo de los cóndores dan la sensación de estar en el mismo cielo. Hasta la próxima!!!
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